Las polillas son insectos del orden Lepidoptera, parientes cercanos de las mariposas. Aunque muchas especies son inofensivas y viven en la naturaleza, algunas polillas domésticas pueden convertirse en plagas molestas y dañinas.
¿Dónde viven?
Las polillas pueden encontrarse en diferentes ambientes, dependiendo de la especie:
• Polillas de la ropa (Tineola bisselliella): viven en clósets, roperos, cajones y entre la ropa almacenada, especialmente si contiene lana, seda o cuero.
• Polillas de despensa (Plodia interpunctella o polilla india): habitan en cocinas, alacenas y despensas, donde encuentran alimentos secos.
Estas polillas suelen esconderse en lugares oscuros, tranquilos y con poca ventilación.
Problemas que ocasionan
Aunque las polillas adultas por lo general no causan daños, sus larvas (pequeños gusanos o orugas) pueden provocar problemas importantes:
• Daños a la ropa y textiles: las larvas de polilla de ropa se alimentan de fibras naturales, dejando agujeros en prendas, alfombras y tapicerías.
• Contaminación de alimentos: las larvas de polillas de despensa infestan alimentos secos como harina, cereales, arroz, frutos secos, entre otros.
• Problemas estéticos y de limpieza: dejan hilos de seda, residuos y pupas en los lugares donde se esconden.
Alimentación
La alimentación de las polillas depende de su especie y etapa de vida:
• Larvas de polilla de ropa: comen fibras animales como lana, cuero, piel, plumas y seda.
• Larvas de polilla de despensa: consumen alimentos almacenados como granos, harinas, galletas y especias.
• Polillas adultas: muchas especies no se alimentan en absoluto, y si lo hacen, toman néctar o líquidos azucarados.
Las larvas son las responsables de la mayoría de los daños, ya que necesitan energía para crecer y transformarse en adultos. Las polillas pueden pasar desapercibidas, pero sus larvas causan daños en ropa y alimentos. Para evitar infestaciones, es importante mantener la limpieza, almacenar correctamente los alimentos y revisar regularmente los textiles guardados.